SEMANA 25: EL MATRIMONIO COMO UN EQUIPO

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El matrimonio es especial, pero no es tan único que los conceptos aplicables a otros esfuerzos en equipo no puedan aplicarse a lo que una pareja experimenta en el matrimonio. Es fácil separar en categorías nuestro pensamiento y no darnos cuenta que lo que se ha aprendido acerca de las dinámicas del trabajo en equipo pudieran también aplicarse al matrimonio.

Similar al funcionamiento como parte de un equipo en el lugar de trabajo, los esposos y esposas necesitan estar unidos por valores compartidos, coordinados a través de reglas básicas mutuamente aceptables para la toma de decisiones y dirigidos por un propósito declarado y objetivos alineados. También es necesario que haya una responsabilidad mutua en la que el esposo y la esposa se comuniquen libremente para evaluar los resultados en relación con las metas, identificar oportunidades de mejora y celebrar los logros. Esta interacción debe tener lugar en una atmósfera de respeto mutuo y transparencia donde la apertura, la honestidad y la colaboración crean compromiso y confianza.

Una visión compartida, comunicación abierta y honestidad entre los miembros del equipo mejorará significativamente las posibilidades de éxito en el lugar de trabajo, y la aplicación de estos mismos principios en el matrimonio mejorará en gran medida la probabilidad de un matrimonio exitoso.

Referencia de las Escrituras: Efesios 5: 31-32

«Por eso dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y los dos llegarán a ser un solo cuerpo». Esto es un misterio profundo; yo me refiero a Cristo y a la iglesia. (NVI)

Algunas Cosas Para Hacer Durante La Semana.

Día 2: Reflexionar sobre el mensaje y la lectura de las Escrituras; diario si quieres
Día 3: Ora o medita sobre lo que crees que necesitas
Día 4: Discuta el mensaje y las escrituras con su cónyuge
Día 5: Planifique cómo puede responder mejor al mensaje
Día 6: Descanso; no pienses en el mensaje o la escritura; escucha en la quietud
Día 7: Vuelve a comprometerte con tu matrimonio